Era la primera vez que se nos ocurría ir a Villajoyosa Beach. Mira que es doblar el cabo de la playa de Poniente de Benidorm y te das con la pequeña bahía de Villajoyosa. Pues nada no habíamos ido. Hemos tenido que instalarnos allí unos días para, desde su playa (con bandera azul de la UE), ver tras el pequeño puerto de la Vila asomar por encima de cabo de Poniente la mole del Hotel Bali de Benidorm. Y la piedra Marina que por punto de mira tiene Benidorm en el ojo de cada turista que mira hacia el mar desde su playa. En fin a tiro de piedra: ni que decir tiene que no tiene nada que ver Villajoyosa con Benidorm y son vecinas, no se si bien avenidas o no. Conociéndonos a los españoles ya me extrañaría que fuese lo positivo, pero igual va a dar. Dicen los de la Vila que ésta es ciudad dormitorio de Benidorm. Que el ambiente y el dinero está en la “Miami” del mediterráneo y que ellos son un pueblo de pescadores. No voy a discutir afirmación de sus gentes, pero la paz, el sosiego y la tranquilidad que tienen y de las que gozan es seguro que habrá momentos que ya las quisieran para sí algunos de Benidorm.
De todos modos no solo de mar vive el hombre, abrir el periódico y ver lo que se cuece en las Ollas de los Ayuntamientos, viene a ser la forma de igualar a tirios y a troyanos, todos son de la misma madera. Líos, especulaciones, especuladores, dobles o triples sueldos, contratas que tienen las “patas muy cortas” y todo el argot de corrupción, desidia, mal hacer y peor ejemplo que desde la Vara de Mando han dado y están dando los ayuntamientos, casi por doquier.
Qué pena que alguien, o algo, y digo algo, porque raro tiene que ser quién pusiese orden y cordura en toda esta “ferrallería” que entre todos han montado, que entre todos han “pelado” y digo pelado porque así han dejado las cajas, y las ganas de los viandantes y vecinos, que ni les apetece mirarles a la cara.
Debiéramos manifestar algún tipo de actitud hacia los gobernantes que diese a entender que no son queridos, que digo queridos, que no son bien vistos, que mejor estarían en su casa, o en la casa común llamada cárcel, si sus andanzas lo merecen. Pero no las manifestaciones clásicas de: sales a la calle organizas una marcha y rellenas el barullo con pancartas, eso no, eso está pasado de moda, eso les importa un pimiento. Algún otro tipo de postura o actitud que les hiciese avergonzarse ante la gente. Veo difícil que sientan vergüenza, difícil, pero al menos en las poblaciones de un número de habitantes en las que nos conocemos casi todos, debiéramos de mostrar nuestra disconformidad, nuestro rechazo y nuestro malestar.
Nos van a dar un verano de aúpa, con los recortes, y con las obligaciones que nos van a imponer los “Hombres de Negro” de allende Flandes, y nos van a dejar como el gallo morón cacareando y sin plumas, y a pesar de todo, toda la reata de mangantes, vividores, corrupcetes, corrupcillos, corruptos y sisadores de lo ajeno están tan a gusto y tan frescos, sin que nadie les pida cuentas. A buen seguro que devolviendo todo lo que se han llevado, algún recorte habrían de evitarse los “paganos” de turno.
Este país está de atar, muy de atar. Pero que muy de atar. Llevo años oyendo decir que el Otoño será caliente. Nunca vi ninguno ni con las temperaturas templadas. Veremos éste del 2012 si es el “esperado”.